De manera histórica la LIX Legislatura de la Paridad de Género, aprobó
por 21 votos de los presentes reconocer los derechos de la naturaleza,
iniciativa realizada por la Diputada Blanca Livier Rodríguez Osorio,
Presidenta de la Comisión de Protección y Mejoramiento Ambiental.
De esta manera se establecen los derechos de Cuarta Generación, que sin
que sin duda promuevan una mejor calidad de vida por y para el cuidado,
además de la preservación del medio ambiente.
Agregó que todos somos responsables del cuidado del medio ambiente, el
cual es un asunto orden público, en virtud de que de la naturaleza o
medio ambiente, depende la existencia del ser humano.
Rodríguez Osorio también expuso que en el dictamen también se reconoce a
los animales como seres sintientes, es decir, se entienden como seres
susceptibles de sentir, por lo que para evitar que sean dañados, se
prevé como una responsabilidad de todos y todas su protección, cuidado y
conservación.
La Diputada morenista señaló que estos derechos ya son una realidad en
otras partes del mundo y puso de ejemplo la Constitución Política de
Ecuador, disponiendo que la naturaleza es sujeto de derechos en los
artículos 10, 71, 72, 73 y 74.
Por su parte, en la Constitución de la Ciudad de México, se ha
establecido con mucha precisión que la naturaleza es sujeta de derechos,
esto, siempre desde la perspectiva de un todo, de que la naturaleza en
su conjunto sea considerada como un ente colectivo.
La Diputada también señaló que en la Constitución del Estado Libre y
Soberano de Guerrero, también se contempla el derecho de la naturaleza
desde el punto de vista precautorio, el cual puede entenderse como el
conjunto de medidas o acciones tendientes a evitar un daño o deterioro
al medio ambiente.
La iniciadora señaló que esta idea parte de que el derecho a un medio
ambiente sano constituye la piedra angular para protegerlo y a su vez
disfrutarlo de manera responsable y sostenible, lo que sin duda se
traduce en un derecho recíproco frente a la naturaleza, mientras que el
ser humano tiene el deber de cuidarlo para procurarse un bien a sí
mismo, la naturaleza tiene el derecho de ser protegida para su
subsistencia.