El Aeropuerto Internacional de Manzanillo Costalegre celebra la reactivación de dos rutas internacionales. La primera con Houston, que no se realizaba desde el 25 de marzo, y la segunda con Phoenix, que dejó de operar el 4 de abril; ambas habían suspendido operaciones a causa de la pandemia.

El vuelo desde y hacia Houston es operado por United Airlines, con frecuencia una vez a la semana, los sábados, en una aeronave con capacidad para 86 pasajeros. La ruta desde y hacia Phoenix es operada por American Airlines, quienes también tendrán un vuelo a la semana, en sábado, con un avión que ofrece 86 asientos.

Entre las salidas y llegadas que se realizarán a estas dos rutas, las aerolíneas que retoman estos vuelos presentan una oferta aproximada de 18 mil asientos cada año.

El Aeropuerto Internacional de Manzanillo Costalegre está preparado para recibir de vuelta a este número de pasajeros, pues en los últimos cinco años se han invertido más de 100 millones de pesos en la ampliación de 900 metros cuadrados de la Terminal y la remodelación de la Sala de Última Espera, la cual cuenta con módulos sanitarios ampliados y renovados, un baby room, y asientos ergonómicos para brindar mayor confort a los pasajeros. Además, para hacer el tránsito de los usuarios más ágil y seguro, el Aeropuerto ha duplicado el espacio del módulo de revisión de pasajeros e instalado un nuevo equipo de inspección con última tecnología.

Las inversiones que realiza el Grupo Aeroportuario del Pacífico (GAP) esperan promover el crecimiento socioeconómico y el atractivo turístico de la región Manzanillo Costalegre. Si bien se han hecho grandes inversiones hasta el momento, Sarahí Castro Araiza, administradora del Aeropuerto apuntó que el Grupo Aeroportuario del Pacífico “apuesta por México y por Colima, y en los próximos años habrá una inversión mayor a la que se ha hecho en los últimos cinco años, pues es fundamental estar a la altura de un destino turístico tan hermoso como Manzanillo y la región de Costalegre”.

Las medidas que implementa el GAP para prevenir posibles contagios de Coronavirus, brindar confianza a pasajeros y mantener al transporte aéreo como el más seguro, van desde la instalación de controles sanitarios en coordinación con las autoridades competentes y sanitización de mobiliario, hasta la instalación de cámaras termográficas o la limitación de aforos para respetar la distancia entre usuarios.

Los protocolos establecidos siguen las recomendaciones publicadas por la Agencia Federal de Aviación Civil (AFAC), la Organización de Aviación Civil Internacional (OACI) y bajo recomendaciones de una entidad reconocida en salud, el Sistema de Salud del Tecnológico de Monterrey (TecSalud). Esto ha permitido que GAP sea reconocido como el primer grupo aeroportuario en el mundo en obtener la certificación Airport Health Accreditation Programme (AHA) otorgada por la Airports Council International (ACI) y se ha distinguido a todos los aeropuertos que opera con el Sello #SafeTravels, expedido por el World Travel & Tourism Council (WTTC).