El gobernador José Ignacio Peralta Sánchez adelantó que con el ritmo de contagios actual de Covid-19, el sistema de salud podría colapsar, por lo que hizo un llamado a la población a actuar con responsabilidad, pues es evidente que las personas han relajado las medidas.

Recordó que el primer caso de Covid-19 en Colima se registró el pasado 17 de marzo y hasta el 26 de mayo, más de dos meses después, apenas se acumularon 121 casos positivos.

En contraste, en los últimos dos días se registraron 123 casos positivos de Covid-19. “Es decir, en dos días tenemos más casos que en los primeros 70 días a partir de la presencia del virus en Colima”, expuso.

Además, dijo Colima tiene ya más de 100 defunciones, entre ellas una bebé de apenas 5 meses de edad; por lo que extendió sus condolencias a todas las familias que han perdido a alguien.

“Tenemos un acelerado crecimiento exponencial y se hace necesario implementar fuertes medidas para contener los brotes epidémicos”, comentó.

Ignacio Perales subrayó que Colima ha entrado de lleno a la fase más complicada de la pandemia.

“Entiendo el hartazgo de la cuarentena y, sobre todo, la necesidad de trabajar para obtener el sustento diario. Lo hemos dicho antes y quiero reiterarlo: nos preocupa la economía, pero tenemos claro que la prioridad es la salud y la vida de las personas”, comentó

Recordó que las medidas que implementó con oportunidad permitieron impulsar la reconversión hospitalaria, y prepararse así para estar en mejores condiciones de enfrentar la pandemia.

Sin embargo, en las calles es evidente que la población relajó las medidas de prevención. La indisciplina, pero sobre todo, la falta de conciencia se ha vuelto una constante en el comportamiento de algunos grupos sociales.

Por ello, sentenció que de nada servirán las medidas implementadas si olvidamos o dejamos de acatar las recomendaciones.

Peralta Sánchez enfatizó que muchas personas se exponen por salvar vidas y los demás no podemos ser indolentes, ni podemos permitirnos caer en la irresponsabilidad.

“Les recuerdo que el problema no está resuelto, que el virus sigue amenazando nuestra salud y la propia vida, y que aún no existe una solución científica de aplicación masiva para este problema”.

Continuó: “En México vivimos una tragedia que nadie quiere reconocer. El Gobierno Federal no está logrando una coordinación adecuada con las instituciones estatales, incluyendo a los gobernadores. Podemos apreciar, además, que prácticamente todos los pronósticos han fallado”

Por su parte, expresó que frente al orden de gobierno municipal tenemos de todo: “presidentas y presidentes municipales que se comprometen y otros que solo hacen política, desentendiéndose de su responsabilidad”.

El gobernador dijo que se enfrentan por lo menos 3 crisis en todo el país: todas simultáneas, generalizadas y exógenas, es decir, se gestaron fuera de la política pública: La crisis sanitaria por el Covid-19, la crisis económica y la crisis de seguridad.

Los instrumentos a nuestro alcance para hacer frente a estas crisis son limitados, por lo que se requiere la solidaridad y participación de toda la sociedad. Desde empresarios, maestros, trabajadores del hogar, profesionistas, obreros.

Para el Gobernador es comprensible que hay quienes tienen que ganarse el sustento diario y salen a la calle asumiendo el riesgo que eso implica, pero a ellos les pidió que tomen todas las medidas sanitarias posibles y al resto que pueden quedarse en casa, exigió que lo hagan.

“Es inaceptable que tengamos colaboradores que se esfuerzan y ponen en riesgo su integridad para atender a pacientes que se contagiaron por irresponsables, o porque se fueron de vacaciones, o no aceptan el uso obligatorio de cubrebocas”, lamentó.

“Yo creo que la sociedad de Colima es mucho más responsable de lo que estamos demostrando”.

Dijo que como Gobernador ha hecho todo lo que considera posible para proteger a la población, pero aceptó que la tarea se hace muy compleja cuando el comportamiento de una parte de la propia población no es corresponsable.

“El sistema de salud del Estado no va a soportar el ritmo de contagios actual: no habrá camas que alcancen, no habrá ventiladores disponibles, ni personal médico, porque ni aquí ni en ningún lugar del mundo existe un sistema hospitalario suficiente para una pandemia. Evitemos que el sistema de salud colapse”, exhortó.

En ese sentido, fue tajante al señalar que No hay marcha atrás; se deben aplicar de forma rigurosa las medidas: los operativos de cierres de negocios no esenciales ya se realizan, no habrá tolerancia a fiestas, ni a reuniones en espacios públicos, no más gente sin cubrebocas en las calles.

Anunció que en breve sesionará de nuevo el Comité Estatal de Seguridad en Salud y el Consejo Estatal de Protección Civil para definir nuevas medidas.

“Pero no todo lo podemos hacer desde el Gobierno del Estado. Les pido que no nos trasladen toda la carga, porque no habrá personal que alcance, por eso es un acto de corresponsabilidad social”, añadió tras pedir que la gente no acuda a fiestas, ni a negocios en donde no hay protocolos y que respeten las reglas de higiene.

Finalmente dijo que la mayor tragedia de esta enfermedad es que nosotros mismos la alimentamos. “Nuestra irresponsabilidad e insensibilidad puede costarle la vida a quienes más queremos”.